Emigré a España hace dos años: ¿Vale la pena en 2024?
¿Cómo fue mi llegada a España?
Llegué a España el 15 de junio de 2022, en pleno verano madrileño, sin muchas expectativas. La primera etapa fue de deslumbramiento: maravillada por los monumentos, el transporte público y la posibilidad de viajar por todo el país a precios asequibles. Sin embargo, esto también implicó un gasto considerable en ropa, calzado y salidas.
Traía un plan migratorio para solicitar una estancia de estudios y trabajar, pero mi solicitud tardó seis meses en ser aprobada, tiempo en el que no podía trabajar. Durante ese tiempo, fui invitada a un canal de YouTube para contar mi historia, lo que me inspiró a empezar a hacer asesorías online para estancias por estudios. Desde entonces, siempre he trabajado por cuenta propia.
¿Cuánto tiempo tardé en encontrar mi camino hacia lo que quería hacer?
Me tomó un año encontrar mi camino. En mi primer año empecé a estudiar una FP de termalismo y bienestar, pero tenía claro que no quería dedicarme a eso. Decidí que lo mío eran los trámites administrativos y empecé a estudiar un Máster habilitante para poder ejercer como Gestora Administrativa. Ahí fue cuando encontré mi camino profesional.
¿Cuánto me duró el dinero que traía ahorrado?
Llegué con alrededor de €7.000 para mi estancia de estudios. En el primer año, gasté en viajes, ropa, y otros artículos de necesidad como un abanico y una plancha. En 7-8 meses ya no tenía ahorros y empecé a vivir solo de mi trabajo. España, si no sabes controlarte, puede convertirse en una pesadilla, especialmente en una ciudad costosa como Madrid. Los gastos son altos, y no he tenido la oportunidad de ahorrar.
¿Me endeudé estos dos años?
Claro que estoy endeudada. Después de la etapa del deslumbramiento y la búsqueda de mi camino, vino la etapa del endeudamiento. Me endeudé con mi banco en Colombia para poder pagar el Máster y la colegiación. El segundo año fue de especialización, estudio y deuda. Pero con mi emprendimiento y mi proyecto de gestoría, he logrado salir adelante.
¿Ha sido fácil?
No, para nada. Estudiar en España ha sido muy difícil y una etapa muy agobiante llena de retos y dificultades. Al principio, no me veía capaz de superarla, pero al final lo logré contra todo pronóstico. Ha sido mi etapa más difícil hasta el momento.
¿Valió la pena? ¿He evolucionado en estos dos años en relación con mi país de origen?
Definitivamente, sí. He evolucionado profesionalmente y como persona en estos dos años en España, más de lo que hubiera logrado en mi país en 10 años. Emigrar no es fácil: van a querer abandonar, llorar, deprimirse, extrañar, tener ansiedad, y enfrentar cambios físicos. A mí me pasó todo eso, pero logré superar todas esas etapas y no abandoné.
¿Qué me depara mi tercer año en España?
En mi tercer año, planeo empezar a producir y recoger los frutos de todo el esfuerzo realizado. Este año me concentraré en ejercer mi profesión y salir de las deudas adquiridas durante el segundo año.
En resumen...
El primer año fue de deslumbramiento y gasto de ahorros. El segundo año, una inversión para el desarrollo profesional o emprendimiento. El tercer año será para pagar las deudas adquiridas y ver los beneficios netos en el cuarto y quinto año. Consolidarse en un nuevo país lleva tiempo, y para mí, un migrante logra estabilidad y ganancias en un periodo de cinco años. Así que, paciencia y disfruten todas las etapas de este proceso.